Autoestima, relaciones tóxicas y laculpa


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Querida culpa, mi autoestima y yo estamos hasta el coño de ti!

Aun así, hoy por fin decido verte y reconocerte.

Hoy decido aceptarte y darte lugar dentro de mi.

Aquí tienes mi cuerpo, sírvete de él y vaga libremente por cada recodo de mis composturas.

Imprégname de esa horrible e incómoda sensación que durante tiempo he estado evitando.

Es hora de que te quedes en mi, de que me habites.

Te pido perdón, por no hacerte ni el más mínimo caso.

Durante todo este tiempo, he intentado evadirme de ti.

Me agarré a miles de cosas para no sentirte. Incluso me volví adicta a cosas externas para no escucharte y poco a poco fui minando mi autoestima.

Busqué cientos de maneras para castigarme por sentirte, en vez de tomarme un café contigo.

Bendita culpa, ahora te veo y te reconozco, tal cual eres.

Tienes una intensidad tan devastadora que acabé fumando, pegándome grandes comilonas, drogándome, maltratándome y aceptando relaciones llenas de faltas de respeto y de manipulación.

Por no hacerte caso, fue peor el remedio, que la enfermedad.

Los hombres y el mundo me devolvieron las bofetadas emocionales de mi ceguera.

Mi vida y mi autoestima han sido una caos desde que decidí jugar al escondite contigo.

Hice todo lo posible por echarte de mi y cargarte sobre otros.

Ahora puedo entender, que formas parte de mis entrañas y que no puedo separarte de mi.

Cada vez que intento venderte, acabo comprando más culpa ahí fuera en el exterior.

No puedo más, el desgarro de tu vacío se multiplica en mi.

Te honro, decido vivirte, liberarte y liberarme.

Te doy las gracias por acudir a mi llamada.

Estoy abierta a ti culpa mía.


¿Cuál es tu mensaje?¿Qué debo aprender de ti? Ilumíname, ya estoy preparada…..


(3 minutos después)

Ahhh por fin puedo ver!

Ahora puedo ver tu intención positiva. Me intentabas proteger.

Pero ¿De quién?

Ahhh de mi misma. Y ¿Por qué?

Ahhh porque renuncié a la pureza de mi corazón y elegí vivir desde el miedo.

Ahhh porque decidí vivir creyendo que el exterior quería humillarme.

Joder amiga, como duele escucharte…

¿Y cómo dejo de hacerlo?

Entiendo. A través de la responsabilidad, siendo consecuente de mis actos y evolucionando.

Aha. Teniendo en cuenta que los fallos y las caídas forman parte de la vida. Aprendiendo de todo ello y no repitiendo lo mismo una y otra vez.

Ahhh, gracias!

¿Y por qué produzco tanto dolor ahí fuera?

Ahhh que yo solo puedo tener el control de la intención de cada una de mis acciones.

Ohhh que el otro está lidiando la misma batalla que yo he estado postergando todo este tiempo, está evitando su propia culpa.

Uhhh que deje a los demás ser responsables de sus actos y que me libere de lo que no me pertenece.

Querida culpa, siento como mi cuerpo se aligera y vuelve a la paz.

(suspiro de más de 15 segundos)

Algo está pasando, ya no puedo verte. ¿Sigues ahí? ¿Dónde estás?

Gracias hermosa culpa, ahora veo que soy INOCENTE.

Te amo.


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Es posible vivir relaciones más saludables y con más libertad!

Un abrazo enorme Mujer Poderosa